El velódromo de Molina de Segura, ubicado en la Región de Murcia, ha experimentado una notable transformación en los últimos años, convirtiéndose en un importante centro para el ciclismo regional.
El velódromo fue inaugurado originalmente el 20 de diciembre de 1982. Sin embargo, desde los años noventa, la instalación cayó en desuso y sufrió un progresivo deterioro. Afortunadamente, en años recientes, se ha llevado a cabo un ambicioso proyecto de rehabilitación para devolver el velódromo a su antiguo esplendor. Las obras de renovación se dividieron en dos fases. La primera fase se centró en trabajos de acondicionamiento para poner la instalación en funcionamiento. Posteriormente, se realizaron reparaciones adicionales debido a los daños causados por la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que afectó la zona entre el 9 y el 16 de septiembre de 2019.
El velódromo de Molina de Segura cuenta con una pista de 250 metros o menos, lo que lo hace ideal para competiciones de sprint. Esta característica ha permitido que la instalación acoja eventos importantes, como el Gran Premio Velódromo Municipal Alejandro Valverde, que ya ha celebrado su segunda edición.
Para potenciar el uso de la instalación, el Ayuntamiento de Molina de Segura y la Federación de Ciclismo de la Región de Murcia han trabajado en un convenio de uso compartido. Este acuerdo busca aunar la demanda deportiva y promover la práctica del ciclismo en la localidad. Impacto en el ciclismo regional. La reapertura del velódromo ha tenido un impacto significativo en el ciclismo de la Región de Murcia. La instalación no solo ofrece un espacio de entrenamiento para ciclistas locales, sino que también atrae a deportistas de otras áreas, contribuyendo al desarrollo del ciclismo en pista en la región. En conclusión, el velódromo de Molina de Segura ha resurgido como un importante activo deportivo, ofreciendo nuevas oportunidades para el ciclismo en pista y fortaleciendo la infraestructura deportiva de la Región de Murcia.